"Estamos en una inercia de pobreza", informó José Luis de la Cruz, director del Centro de Investigación en Economías y Negocios.
El gobierno del presidente Felipe Calderón dejará como "herencia" quince millones de pobres por ingreso adicionales a los que había cuando inició su sexenio, advirtió José Luis de la Cruz Gallegos, director del Centro de Investigación en Economías y Negocios (CIEN) del Tecnológico de Monterrey, campus estado de México.
Explicó que aunque México muestra signos de crecimiento económico y también en la generación de empleos, esto no se traduce en una reducción de la pobreza y mejores salarios, así que pronosticó que en 2012 habrá 60 millones de pobres por ingreso, contra 45 millones que se contabilizaron en 2006. "Estamos en una inercia de pobreza", sentenció.
En conferencia de prensa donde presentó "Una agenda mínima para México", el investigador destacó también que los alimentos se han encarecido hasta en 50 por ciento en este gobierno, en contraste con la inflación general de 4 por ciento en promedio anual.
"El empleo ya no garantiza salir de la pobreza y si se considera que la población más pobre destina el 50 por ciento de sus ingresos a comprar alimentos, tener salarios bajos limita su capacidad de compra", puntualizó.
Dijo que el salario mínimo no debe ser tomado una manera de control sino para garantizar el bienestar mínimo de los trabajadores y mencionó como ejemplo las medidas tomadas en Brasil donde se incrementó el salario mínimo y se puso en marcha un programa para abatir el hambre.
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