La empresa Cyepsa sustituye las líneas de electricidad de cobre por alumnio
Unos 50 efectivos de la Policía Federal preventiva arribaron a Necaxa y Nuevo Necaxa para resguardar los trabajos de empleados de la empresa Construcciones Civiles y Eléctricas de Puebla S.A. (Cyepsa) que labora para la Comisión Federal de Electricidad, provocando tensión y desencuentros con miembros del Sindicato Mexicano de Electricistas.
El objetivo, según se supo después de varias discusiones, era sustituir -este fin de semana- algunas líneas conductoras de electricidad de cobre por aluminio, que van de la junta auxiliar de Cuautlita en Huauchinango hasta Nuevo Necaxa en Juan Galindo.
Los policías llegaron en un camión de pasajeros con rótulos de una empresa turística y portaban uniformes azul marino y azul claro, y de acuerdo con versiones de los lugareños “no eran policías sino militares”.
Un ex trabajador Luz y Fuerza del Centro (LyFC) que prefirió no dar su nombre, encaró a los contratistas de la CFE, cuestionándolos sobre sus actividades a la altura del Panteón Municipal de Necaxa, expresándoles que el área es “territorio del SME, no me dieron más oportunidad: los policías empuñaron sus armas largas, me apuntaron y me pidieron que me retirara”.
Otro trabajador en resistencia intentó grabar desde su automóvil las maniobras que estaban haciendo los empleados de Cyepsa, los federales lo bajaron, fue encañonado y lo amenazaron con darle una golpiza, si continuaba tomando una película de los trabajos de los electricistas de la CFE.
Para los electricistas, especialistas en el mantenimiento de las líneas, los trabajos que se están haciendo por parte de la CFE son innecesarios porque “solamente requieren verificarse, checar empalmes, aisladores, pero no esos cambios, parece más un saqueo que mantenimiento, porque el cobre es mejor conductor de electricidad que el aluminio”.
Cuando se emitió el decreto de extinción de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro, se les dijo a los agremiados al SME que las instalaciones de LyFC pasarían a manos de la CFE en calidad de comodato, “pero nunca especificaron que el comodato implica o permite el saqueo”, reclamaron.
Los trabajadores de la empresa privada llegaron en dos camionetas de redilas de 3 y media toneladas, una color rojo y otra color blanco, y con ellos se trasladaban los guardias de la policía federal.
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