Organizaciones de Argentina, Uruguay, Venezuela, Cuba, Colombia, México y otras 14 naciones acordaron ayer unificar el movimiento sindical de la región; conformar un frente común frente a la ofensiva del capital en contra de los trabajadores y buscar la construcción de un orden económico y político alternativo que no desangre ni criminalice a los obreros y campesinos, señala el documento final del Encuentro Sindical Nuestra América (ESNA).